El abuelo y el nieto (extracto)
.....Cuando estaba a la mesa, apenas podía sostener su cuchara, dejaba caer la copa en el mantel, y aun algunas veces escapar
la baba. La mujer de su hijo y su mismo hijo estaban muy disgustados con él, hasta que, por último, lo dejaron en un rincón de un cuarto, donde le llevaban su escasa comida en un plato viejo de
barro. El anciano lloraba con frecuencia y miraba con tristeza hacia la mesa. Un día se cayó al suelo, y se le rompió la escudilla que apenas podía sostener en sus temblorosas manos. Su nuera lo
llenó de improperios a los que no se atrevió a responder, y bajó la cabeza suspirando.....