La mujer y su gallina

Una mujer viuda tenía una gallina que le ponía un huevo todos los días. Pensó que si le daba más cebada pondría dos huevos, y aumentó su ración. Pero la gallina engordó y ya no pudo ni poner una vez al día.
Moraleja:
Debemos dar gracias por la merced diaria y no ser arrogantes y pretensiosos pensando que podemos cambiar lo establecido.